Información de calidad

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Por Alejandro Flores

Es difícil para muchos entender el trabajo de los periodistas, a menos que trabajen en algún medio de comunicación masiva o hayan estudiado para ello, la tarea más difícil radica en los reporteros quienes tienen que por así decirlo vender su nota y lidiar contra los editores, directores, etc, y mucho más si lo que quieren es publicar una crítica, denunciar o hacer visibles los efectos de la discriminación en nuestro país.

Me parece importante rescatar algunas sugerencias que en mi particular punto de vista me parecen básicas en el ejercicio periodístico y que, como estudiantes de licenciatura de ciencias de la comunicación nos fortalecerá en nuestro futuro profesional, la primera de ellas es el tener cuidado con las palabras que empleamos y el conocimiento normativo del derecho a la no discriminación y del periodismo en general, además de los programas sociales y políticas públicas. Sin embargo, lo que me parece más relevante priorizar es la reflexión en el publico que podamos generar, hacer un trabajo digno del periodismo, con una investigación previa en donde podamos informar, explicar e incluso advertir a los lectores sobre algún acontecimiento específico y finalmente terminar con la discriminación en las publicaciones.

Algunos puntos clave que debemos cuidar es el uso de palabras que puedan ser discriminatorias para personas con distintas preferencias sexuales, su raza, su trabajo, condiciones sociales etc.; Discriminar no sólo significa diferenciar a una persona de otra en el trato, sino de colocarla injustamente en una situación inferioridad, con base en la descalificación de un rasgo o característica que es innata e inmodificable, la discriminación tiene sus raíces en los estereotipos, estigmas y prejuicios, que no hacen otra cosa más que colocar a alguien en una situación de desventaja e inferiorizarlos.

Las condiciones principales para que se cometan actos de discriminación son  la DISTINCIÓN, la RESTRICCIÓN y la NEGACIÓN. Debemos estar conscientes de ello ya que se nos podría pasar por alto algún detalle y atentar contra los derechos de terceros además de que esto puede agravar alguna situación o ser causa de alguna manifestación.

Lo que perdemos al discriminar, tiene un alto costo en lo individual y en lo social, una víctima de la discriminación puede padecer frustración, baja autoestima, rencor, y esto puede impactar en su capacidad física, mental y emocional.

Eso si, es importante diferenciar la libertad de expresión y la no discriminación, los límites parten de la ética y la responsabilidad social y muchas veces dependen de la consecuencia que estas publicaciones generen, por que si se rebasa el derecho a la libertad de expresión, estaríamos cayendo en el libertinaje pasando sobre los derechos de terceros.

Una práctica común del periodismo discriminatorio es darle un valor superlativo a determinados logros deportivos, sociales, culturales, económicos o políticos de las personas. 

El análisis del tratamiento informativo nos hace entender la relación de la falta códigos éticos y criterios editoriales claros en los medios de comunicación.

Es muy importante tomar en cuenta el lenguaje que se emplea a la hora de redactar una nota, ya que podemos caer en la discriminación por algún detalle de léxico, una cuestión sintáctica, de retórica o incluso llegar a generalizaciones y subestimar a las personas según sea el caso. Un ejemplo claro es la normalización o generalización, donde se da por hecho que todos los casos no se deben cuestionar pos su naturaleza, que “eso es normal o natural”.

Para finalizar, debemos reflexionar sobre el hecho de combatir a la discriminación, debemos evitar usar términos peyorativos o victimizarlos todavía más como recurso para atraer la atención, emitir juicios en una nota informativa, a recurrir a fuentes alternativas de información y no limitarse a la versión “oficial” de la autoridad; combatir la discriminación, implica transformar las condiciones estructurales de desigualdad e injusticia, es decir, debemos empezar por comprometernos con la modificación del sistema, lleno de prejuicios e intolerancia y con ello mejorar la calidad periodística de nuestro país.